Decidimos hacer algo muy pequeño para conmemorar nuestro casamiento. Lo primero que definimos fue cómo visualizábamos nuestra celebración. Para reflejarnos, el ambiente debía ser urbano, con estilo y fuera de lo tradicional. Decidimos que una terraza con una vista a la ciudad sería encantadora, y llegamos a la conclusión que buscábamos una celebración "urbana - chic - minimalista".
No había mucho que pensar. Yo (Vane) recordé la noche que subí a la terraza recién terminada del Hotel Boutique La Misión en Asunción, cuando aún se estaba terminando el hotel. Trabajaba en una empresa que preparó la Identidad Corporativa del lugar. Cuando el dueño nos invitó a subir y se abrió el ascensor, la vista que tuve me dio piel de gallina. Fue amor a primera vista.
Dos años antes de la propuesta de casamiento, me dije a mí misma: "acá quiero que sea mi boda". Miré deslumbrada el campanario, las luces y columnas que ambientaban el hotel temático que evoca a los Jesuitas desde la Arquitectura hasta el arte en paredes y cuadros; me conquistó la vista a la ciudad, que parecía apacible desde las alturas. En una altura superior la piscina corona el Roof Garden. De tan sólo pensar en el sentimiento que tuve al ver el lugar, me palpita más fuerte el corazón.
Pasó el tiempo y dos días después del compromiso, fuimos con mis padres a mirar el lugar. Ellos también quedaron encantados (aunque parece que yo soy la más entusiasmada con hacer la cena ahí!). Unos días después, fui con mi suegra, mi cuñada y mi novio, que meses antes fue conmigo a mirar la terraza y a soñar conmigo por celebrar ahí nuestro casamiento.
Las cosas se dieron, y un regalo más del Cielo, podemos pasar ahí la noche. Confiados en que la comida es fabulosa (recuerdo con agua en la boca la comida que saboreamos el mediodía de nuestro compromiso en el restaurante del hotel!), esperamos que pasemos una buena noche.
Imágenes: La Misión Hotel Boutique
0 viajeros que conversan:
Publicar un comentario
Personas que son buena onda y comentan